Lights guide you home.

Hola :3
Bueno, ¿qué tal? Yo fatal, no tengo ningunas ganas de empezar las clases. En parte sí, porque llevo todo el verano viendo series y películas y estoy aburridísima. Y la otra parte es obvia, porque no quiero soportar otra vez a todos esos gilipollas. Pero en fin. Desde hoy queda exactamente una semana para que empiece las clases, es decir, el 14. Pero el 14 sólo vamos por la mañana un rato y no hay que llevar libros ni nada, así que no cuenta. Realmente empiezo el 17 :3
En la última entrada escribí el primer capítulo de lo que sería Moonlight, una historia que surgió en un momento... ¿rarísimo? Sí, definitivamente no se me ocurrió en condiciones normales. Pues a ver, el 10 de agosto me fui de vacaciones a Mallorca, porque tengo una casa allí y tal y cual, ya lo expliqué en la otra entrada. Me fui en un crucero que me llevaba hasta allí, y luego me traía otra vez. Pues bueno, había que dormir en el barco de las narices y la noche no podía haber sido peor. No era la primera vez que montaba en crucero, ni mucho menos; hace unos cuantos años fui en un crucero a Malta, Roma, Egipto, Londres, Genova y Túnez. En fin, que me voy del tema. Que esa noche no dormí, porque a pesar de que no tenía un camarote, sino prácticamente una planta del barco como habitación, no podía dormir. No sé, o no tenía sueño o me daba miedo acabar como en el Titanic. Ni idea. Como en medio del mar no había wifi, como habréis deducido vosotras solitas, no tenía ni twitter ni WA ni nada. Estaba incomunicada. Así que me puse a crear una historia en mi cabeza. Y bueno, yo consideraba que era buena y que esta era la definitiva, pero se ve que no. La puse aquí para algo y sólo me comentó Aqua. En fin, blogger ya no es lo que era. Estoy muy decepcionada. Pero en fin, que no creo que continúe la historia, ahora que empieza el curso y tal y cual. Me pasará como con las otras 50 que empecé y nunca he llegado a acabar.
También os quería decir que como estoy aburridísima me recomendaráis pelis que os gusten, si queréis.
Un beso :3

Moonlight: Capítulo 1.

( Fotos de los personajes en la barra de gadgets de la izquierda <-------- )


Me llamo Caroline Greene. Tengo 16 años. Se podría decir que soy completamente normal.
Observaba caer la nieve por la ventana. Las clases se habían cancelado debido a la gran cantidad de nieve que hay, así que estaba encerrada en mi casa. Noté un ligero temblor en mi colgante, pero pensé que serían imaginaciones mías. Seguía observando como la nieve caía, como los niños hacían muñecos de nieve. A veces tenía ganas de ser otra vez una niña por ese tipo de cosas. Pero ya tenía 16 años, por mucho que me costara admitirlo. Me toqué el colgante. Era una simple cadenita plateada con dos diminutos colgantes: un rayo y una media luna. Nunca he sabido qué significan, ni desde cuando llevo ese colgante: sólo sé que debo llevarlo por mi propio bien.
Estaba sentada al lado de la ventana, entre un montón de mantas. Cada vez me costaba más ver con claridad los copos de nieve, sentía como todo se difuminaba ante mi ojos. No entendía que estaba pasando, pero permanecí quieta. Lo único que vi antes de desvanecerme fue como el rayo de mi colgante se iluminaba y desprendía un haz de luz azul.

Estaba sentada en el suelo. Ya no estaba en mi habitación, sino en un suelo lleno de piedrecitas. Ya no nevaba, el sol brillaba en todo su esplendor. Me levanté, y no podía creer lo que veían mis ojos: era la Antigua Grecia, los mares de aguas azules cristalinas, sirenas, minotauros y dioses del Olimpo. Había un gran templo ante mí de columnas de piedra blancas, tal y como los describían en mis libros de Historia. La gente caminaba a mi alrededor, sí, esa gente que lleva túnicas blancas y sandalias de esparto; era como estar dentro de un libro. No entendía nada de lo que estaba pasando, pero me levanté y caminé hacia el templo.
Cuando ya estaba cerca de las escaleras, noté como algo o alguien se abalanzaba sobre mí  y me tiraba al suelo. Levanté la mirada, y era un chico rubio de unos cuantos años más que yo.
-Perdona. ¿Estás bien?- dijo preocupado.
Me levanté y le miré. Aquellos ojos azules no eran comparables con las descripciones que hacían de ellos en los libros de Historia: eran los auténticos ojos de un dios. Un dios... Eso significaba que él era...
-Me llamo Apolo. Supongo que ya me conocerás por los libros de Historia o lo que sea que hagáis ahí fuera.- dijo entre risas.
-Sé quien eres. Yo soy Caroline, y no sé exactamente porque estoy aquí.-contesté.
-Ah... Creo que puedo ayudarte. Ven conmigo. -dijo con una sonrisa.
Me iría al fin del mundo si hiciera falta con él. Menudo polvazo tiene.
Entramos dentro del templo. Caminamos por unos pasillos hasta llegar a una gran sala blanca, donde todos los dioses estaban sentados alrededor del rey de los dioses: Zeus. Detrás estaban de pie varias filas de chicos y chicas de mi edad, sin saber muy bien que hacer.
-Bueno, ponte ahí y espera a que te llamen.Suerte.-dijo sin más, yendo a ocupar su sitio.
Me puse al lado de todos los demás, visiblemente nerviosa y con un montón de preguntas en la cabeza. ¿Qué estaba haciendo allí? ¿Acaba de hablar con el dios Apolo? ¿Qué hacían todos esos dioses sentados en círculo como si estuvieran en una secta?
Zeus se levantó, levantando de su sitio su larga túnica blanca. Nos miró un poco, y después empezó a hablar.
-Damas y caballeros, habéis sido escogidos de una rigurosa selección para proteger al Olimpo y todos los que lo habitan. Para ser más exactos, sois los famosos protectores del Olimpo. Son tiempos difíciles, y no podíamos arriesgarnos a dejar todo nuestro mundo a su suerte. De vosotros depende que esta etapa histórica viva, o de lo contrario, muera para siempre.
Empezaron a oírse murmullos a mi alrededor y exclamaciones de asombro. El alboroto fue creciendo cada vez más y más hasta que sólo se nos oía a nosotros en todo el templo.
-¡Silencio! Tal escándalo no es digno del Olimpo, muchachos. Ese colgante con un rayo, que representa mi poder, y una media luna, que indica que siempre que miréis la luna, estéis  donde estéis, sabréis cual es vuestro objetivo, lo lleváis desde que nacisteis y lo llevaréis hasta que los dioses dicten lo contrario. Cada vez que os necesitemos, simplemente os esfumaréis y apareceréis aquí.
-¿Y si desaparecemos en medio de una clase?-preguntó una chica pelirroja.
-Nos encargaremos de borrar la memoria a todo aquel que haya presenciado la desaparición.  ¿Más preguntas?-dijo Zeus.
Se hizo el silencio en el Olimpo. Durante un segundo, la mirada de Zeus se posó en la mía, y vi algo familiar en sus ojos, algo que me recordaba a casa, algo que me reconfortaba hasta la última parte de mi cuerpo. No sé porque, pero sentí un escalofrío y una sensación que no había experimentado hasta el momento.
-Doy por concluída la primera reunión de los Protectores del Olimpo.-dijo Zeus.
Todo era confuso a mi alrededor, la voz de Zeus se apagaba cada vez más. Todo se difuminaba ante mis ojos, antes de sumirme en una oscuridad absoluta.

Septiembre, ya casi estás aquí.

¡Hola!
El verano se me está pasando lentísimo. Estoy aburrida como yo sola, el verano pasado creía que este saldría todos los días y tendría amigos guays PFFJAJAJAJAJAJAsi yo odio a la gente. Estoy harta del calor pero no quiero ver a los de mi clase. En fin.

Ya os conté en otras entradas que iba a ir de vacaciones a Mallorca. Bueno, estuve una semana porque tengo una casa allí y eso. Las playas no tienen nada que ver con las de aquí, era todo precioso. Subiría fotos pero estoy buscando una excusa creíble para no hacerlo, ¿vale? La razón principal de que no fuera a Italia, porque estaba cansada ya del sitio, fue que tenía el yate en Palma y hacía mucho que no lo cogía (bueno, más bien mi padre, lo cojo yo y nos mato a todos JAJAJA) En fin, no eran las Bahamas pero estuvo bien.
Le tengo un poco de miedo al nuevo curso, la verdad. Todo era más fácil en primero, cuando eras un novato y te robaban el móvil PFFJAJAJAJA. Sigo buscando una explicación a que mis padres me llevaran a un instituto público. Si veis que el 14 de septiembre no vuelvo para contarlo es porque me he muerto de respirar ese aire, ¿vale?
Otra de las razones por las que puede que muera será por ver otra vez a los de mi clase. En primaria estábamos bien, ¿pero tuvimos que ir todos al mismo instituto, y a la misma clase? Es una tortura, os lo digo así. Y como estoy en un puto instituto público de clase media por los putos recortes seremos más en clase. Y como en Naturales estamos sentados según el orden de lista, en vez de estar con el gilipollas-deojoszules-queestámuybueno-peroesidiota-ymellenabalamochilayestuchededibujosguarros me tocará con la choni. OMFG, después de eso sí que no viviré para contarlo. No voy a poder soportarlo, simplemente la miraré con suficiencia y pasaré de su cara PFFJAJAJAJA. Hablando de Naturales, puede que el profesor también nos de Mates este año. NO.NO.NO.NO.NO.NO.No quiero morir, tío, sólo vamos a pasar a segundo y ya nos toca él. Estoy un poco acojonada, pero bueno. Lo divertido será reírnos de los de primero JAJAJA.
Necesito saber que estoy haciendo algo útil, necesito hacer deberes y estudiar cada día para no sentir que estoy perdiendo el tiempo. Lo echo de menos, despertarme con la puta alarma del móvil, vestirme, ir al instituto, que me roben el móvil PFFJAJAJAJA (ignoremos esto último, me pasó de verdad pero mis abogados casi se los comen, literalmente) tener plástica los lunes a última hora, que mi padre me traiga a casa, ver Otra Movida (tío, lloro, ¿porque lo tuvieron que quitar? ¿ahora qué coño hago yo después de comer? ¿EH? ¿EH?) hacer los deberes, estudiar, ducharme, cenar y leer. ECHO DE MENOS LEER, HOSTIA. Y no puedo. Creo que tengo un síndrome raro o algo, porque esto no es normal. Se me juntan todas las palabras como en un huracán, las intento leer todas a la vez pero es imposible y me agobio afjsnsfj al final cierro el libro y a tomar por culo todo. Y por eso no leo desde junio. FIN.
Los putos profesores nos han mandado deberes para el verano. GRACIAS POR MANDARME UN CUADERNO DE MATEMÁTICAS Y UN PUTO LIBRO EN VALENCIANO QUE NO SE LO LEE NI SU PUTA MADRE, OS QUIERO MUCHO, MY LIFE (L) Los odio, hostia, el verano está para no hacer una puta mierda y tocarse los ovarios (siento la expresión) todo el día, no para estar agobiada las últimas semanas de verano con los putos deberes. TENGO 13 AÑOS. LLEVO TODO EL PUTO CURSO HACIENDO DEBERES, TRABAJOS Y EXÁMENES. ME DAIS TRES PUTOS MESES DE VACACIONES Y HACÉIS QUE ME FRÍA LAS NEURONAS CON LAS PUTAS COSAS DE MATEMÁTICAS QUE NO SE ACUERDA YA NI SU PUTA MADRE. ¿Sabéis que estoy haciendo? Me lo invento todo, y si está mal a tomar por culo. OSKM, PROFES.
Una de las cosas que nunca entenderé de mi instituto es porque coño nos hacen cambiar de taquilla cada año. ME GUSTABA MI TAQUILLA, LA 85, TÚ Y YO FOREVAH (L) NO QUIERO OTRA TAQUILLA, NO HAY NINGUNA QUE ME DE LO QUE TÚ ME DAS, TE AMO TAQUILLA (L) Hostia, como nos toque taquilla de abajo pido la puta hoja de reclamaciones y demando al puto instituto. LA QUIERO COMO SHARPAY. ROSA. Y QUE PONGA LAURA. OSKM, PROFES.
En fin. No estoy borracha ni drogada, ¿eh? ES QUE NO QUIERO IR AL INSTITUTO, SÓLO QUIERO IR PARA REÍRME DE LA GENTE. TENGO GANAS DE SOCIALIZARME Y VER LA LUZ DEL SOL AFJDSSJFDNFXVD ODIO EL CALOR ME VOY A ASFIXIAR NO LO AGUANTO MÁS ODIO A LA GENTE PERO QUIERO REÍRME DE ELLOS, ¿QUE HAGO? ¡HALLUDA HURGENTE!
Y sin más dilación, termino la entrada.
¡OSKM PROFES! Meteros los deberes por el culo (L)
Un beso,
Katdy Mellark.

Jodida inocencia.

Soñaba con tener una nueva vida. Con empezar de cero. Con dejar atrás todas aquellas cosas que me hicieron tanto daño. Creía que todo se arreglaría, que por fin sería feliz. Que tendría amigas, a las que podría contarles todos mis secretos y que ellas me contaran los suyos. A las que poder contar mis pensamientos y que no me juzgaran, que me aceptaran tal y como soy. En vivir una historia de amor como las de los libros o las películas que toda mi vida había estado viendo. En decir "te quiero", en que me lo dijeran a mí y ser felices para siempre.
Tan pronto como lo deseé todo aquello se esfumó en el aire. La fuerza del deseo se hizo tan poderosa como la de las manos. Ansiaba llegar al instituto, pisar ese suelo, respirar por fin tranquila. Ser animadora como en las películas, tener amigas de verdad, enamorarme. Sinceramente, no sé que me esperaba, pero la realidad me estalló en la cara. La llegada al instituto se acercaba cada vez más, y tenía miedo. Miedo de que todos esos sueños se rompieran, que la fantasía que había estado construyendo toda mi vida resultara ser una mentira. Pero lo hice.
Llegué allí, dejándolo todo atrás (excepto a mis compañeros de clase) y me dispuse a empezar de cero. Llegó el otoño, las hojas caían pero yo no veía progresos en mi vida. Llegó el frío invierno, el frío me congelaba los huesos y cada vez tenía menos esperanzas. Llegó la primavera, el calorcito, mi cumpleaños, pero aún así no veía que mi fantasía se cumpliera. Terminó el curso. No podía creer que hubiera terminado sin haber cumplido todos mis propósitos. Supongo que no estaba en mi mano, ¿no? Simplemente pasó.
El dolor que había acumulado durante años regresó al no haber cumplido mi sueño. El dolor de unas palabras, de unas miradas, que hoy en día las recuerdo como si hubieran ocurrido ayer. No creía que mi relación con mis amigas pudiera empeorar más; pero simplemente, aprendí a no fiarme de mí misma. Empezaron a pasar de mí, ya no sabía ni si mi mejor amiga estaba de mi lado; una de las que consideraba mis amigas, que resultó ser una zorra, no me invitó a su cumpleaños. Supongo que querría decirme con eso: "Cariño, tu fantasía americana no se ha hecho realidad. Sigues siendo la misma niña rara de estos nueve años".
Sentí que caía. No podía más. La presión de las notas, de alcanzar la perfección, me agotaba y me motivaba a la vez. Estaba delgadísima, tenía un cuerpazo, un pelo perfecto y unos ojos medianamente bonitos. Hoy en día conservo todo eso, pero no es el caso. Sentí que mi aspecto no servía de nada, que no iba a conseguir ninguna matrícula de honor a final de curso y sentí que me moría. Recuerdo perfectamente la sensación de estar sentada en clase, con mi mejor amiga al lado, mientras todos pasaban de mi aspecto y le decían cosas como: "Eres genial, qué notazas, ¿eh? Eres súper lista, deberían pasarte de curso." Pero no era para tanto. Teníamos notas parecidas, pero todos la preferían a ella.
Sé lo que era: envidia. Mi clase no es precisamente la pasarela Cibeles, así que la envidia que me tenían les comía por dentro y decidieron atacarme por donde más me dolía. Y lo consiguieron. Vaya si lo consiguieron. Acabé el curso hecha un mierda (siento la expresión, pero no sé explicarlo mejor) de los nervios, con unas ganas indescriptibles de verano y de librarme de toda esa gente. Y se me pasó. Poco a poco se me pasó esa ira interna, ese odio indescriptible hacia la humanidad.Supongo que ahora vuelvo a ser la de antes. Pero que cuando empiece el instituto, volveré a caer y no sé si esta vez podré levantarme.
Y así terminó todo.
La conclusión de todo esto es que nunca hay que fiarse de las historias de princesas, donde la princesa siempre hace sus sueños realidad y consigue al príncipe. Porque no vivimos en un cuento de hadas, esto es la puta realidad y si no pisas, te pisan.

Like a skyscraper.

¡Hola! :)

Sí, sé que llevo sin pasarme por aquí como mil años y que tenéis todo el derecho del mundo a lanzarme piedras, a echarme la bronca o a colgarme por las orejas del Big Ben, a elegir. Pero tengo una explicación lógica. Sí, bueno, eh... VALE, NO TENGO NINGUNA EXPLICACIÓN LÓGICA. Mi única excusa es que me daba tanta pereza coger el ordenador y escribir algo que me he pasado todos estos días encerrada en casa viendo series. ¡Hablando de series! Ya he terminado las cinco temporadas de GG. Sí, sé que la última vez que escribí os dije que iba aún por la tercera, mirad si ha pasado tiempo XD  Son la hostia, estoy impaciente por ver la sexta *-* He empezado a ver TVD (Crónicas Vampíricas) y también está muy bien, no tiene nada que ver con Crepúsculo :) 

Este verano está siento MUY aburrido. Pero no aburrido de estar tan sólo dos días encerrada en casa y después volver a salir como siempre y pasártelo chachi, aburrido de estar a punto de colgar un cartel en la puerta de tu habitación que diga "Madriguera de Laura, llame antes de entrar". Tío, es que parezco un topo, no estoy saliendo nada. Pero para eso quería que llegara el verano, para librarme de la gente, ¿no? Vivo SÚPER alejada de todo, me tienen que llevar al instituto en coche y estoy prácticamente en medio de la nada. No veo a nadie, nadie me ve a mí, quedo a veces con mi mejor amiga pero ahí termina la historia. Me gustaría que hubiera un mes más de verano, pero para ver más series. 

Otro tema que tenía que comentar... ¡Ah, sí! Blogger está muerto. Sí, chicas, Blogger ya no es lo que era y lo sabemos todas. Yo me acuerdo que el verano pasado también estaba un poco encerrada en casa pero para hablar con vosotras, no para ver series de vampiros o de la élite de Manhattan. Había mil entradas cada cinco minutos, todas comentábamos, todas nos llevábamos bien y todo era perfecto. Vamos, yo sufría cuando iba me vacaciones por no poder entrar aquí. Pero ya no es así, ahora esto más que un estilo de vida es un entretenimiento que cada muchos meses disfruto. Me da pena, de verdad, con algunas no he perdido el contacto porque seguimos hablando por twitter o tuenti, pero no es lo mismo. En fin, espero que el año que viene esto cambie.

Os tenía que hablar también de mi campamento. Fue súper divertido, lo pasé fatal el último día porque la gente era tan genial y me lo pasé tan bien que no quería irPFFJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA. Me hice muchas ilusiones, tenía las expectativas altísimas y sinceramente no sé que me esperaba de ese campamento, pero fue una real mierda. Nunca he estado en ningún campamento que me haya provocado esas ganas de salir corriendo, irme a mi casa, coger el ordenador y volver a comer la comida de mi madre. Pero una cosa increíble, eh. 

Mis expectativas:

-Multiaventura, tirolina, puente tibetano, carreras de obstáculos, rafting, piragua...

Realidad:

-Cabras, cerdos, ovejas y pavos reales, un mísero rocódromo en todo el campamento, comida asquerosa (de esa que tiene pinta de estar caducada o de que vas a coger una intoxicación alimenticia) habitaciones ESTRECHÍSIMAS con un montón que chonis que no había visto en mi puta vida, juegos y paseos por el campo a las 16:00 de la tarde (cuando el sol pega pero bien, para darte una insolación ahí) sólo nos dejaban el móvil de 14:00 a 15:00 de la tarde y si metías una mano en la piscina corrías el riesgo de sacarla dentro de un cubito de hielo. 

Vamos, una tortura. Lo de la piscina va en serio, era agua de la montaña y estaba ASZFJDSJZXFN. Así que te quedabas cuando te tirabas, yo iba toda contenta con mis expectativas y me ponen una piscina a -30º. WTF? A parte, que a partir del tercer día no me podía ni bañar porque tenía la regla. PLAS, PLAS, LAURA. Te vas a un campamento una semana y ni siquiera puedes bañarte en ese lago congelado de Canadá. Nunca lo había pasado tan mal como esa semana, os lo juro. Había chonis y canis hasta debajo de las piedras, nos despertaban a las 8:00 y nos ponían el Tacatá para ACTIVAR LA CIRCULACIÓN y yo tenía ganas de matar a alguien. Creo que con todas las chonis que había ahí tengo para escribir 126723936237 tweets. Un día fuimos a un pueblo y se compraron TODAS banderas de EEUU y UK. Yo creo que habían salido de MHYV, Jersey Shore, Gran Hermano, Next o algún sitio de esos, porque eso no era normal, eh. En fin, nota mental para el futuro: Laura, no vuelvas a un campamento en tu puta vida.

Y ya está. Ah, hoy sale mi barco a Mallorca, al final no voy a Italia otra vez. Ya he ido tantas veces que da lo mismo, ¿no? Luego iré a Londres, ya haré fotos.

Un beso,

Katdy Mellark.